Rosa Pellicero es una brillante y veterana periodista y consultora en estrategias de comunicación, medios y contenidos digitales. Es cofundadora, y ha sido directora de Aragón Radio durante más de 10 años, en los que la emisora fue ejemplo nacional de gestión e índices de audiencia.
Tras esta entrevista hay tres palabras con las que definiría a Rosa: inteligencia, generosidad y gratitud.

P: ¿De todos los proyectos profesionales que vienes desarrollando en tu vida cuál te hizo o te hace más feliz?
R: Me hizo muy feliz la puesta en marcha de un proyecto tan ilusionante y magnífico, dedicado al servicio público, como la Corporación Aragonesa de Radio y Televisión. Y dentro de ello, su plataforma digital. Fue una experiencia verdaderamente motivadora, creativa y retadora, centrada en las personas y muy innovadora en su momento. No era fácil pero lo conseguimos, y eso es lo mejor que se puede decir.
Hoy me hace muy feliz la puesta en marcha de otro proyecto también ilusionante, junto con los pacientes, profesionales e internos del Centro Neuropsiquiátrico Nuestra Señora del Carmen, donde estamos sacando adelante la radio online abejarradio.fm. Se trata de una iniciativa de comunicación y de integración, que entronca directamente con la comunicación entre personas.
Pero yo soy muy feliz con mi trabajo, que considero diverso y constructivo, y me siento igualmente motivada y en plena actividad con la consultoría en transición digital para corporaciones audiovisuales de radio y televisión. Actualmente me integro en un equipo que acompañamos procesos del cambio en diferentes organizaciones hacia la cultura, la estrategia y la producción y distribución de contenidos en digital. Todo un reto que no hace más que hacerme feliz y sentirme ilusionada como nunca.

P: ¿Crees que las emociones son un motor para la vida?
R: Ciertamente, ¿quién podría no creerlo? Las emociones son necesarias; son un motor para la creatividad, la motivación, el impulso y muchas cosas más, todas ellas fundamentales. También en lo profesional, por supuesto. Creo que, afortunadamente, la época en la que para ser buen profesional tenías que ser una persona carente de emociones ha pasado a la historia.
Por supuesto, incluyo en esto a todas las emociones, siempre que seamos capaces de reconocerlas y gestionarlas bien, por nosotros mismos y por quienes nos rodean, en lo personal y más cercano, y en lo profesional. Creo que nuestra formación como personas y como profesionales, que a fin de cuentas se parece mucho, debería tener en cuenta también el aprendizaje sobre el reconocimiento y gestión de las emociones.

P: ¿Es fácil gestionarlas? ¿Cuándo te has dado cuenta de ello?
R: No siempre es fácil, tanto en lo positivo como en lo negativo. Pero se convierte en fácil cuando te haces consciente de ellas e inicias el aprendizaje sobre el hecho de que forman parte de lo más intrínseco de nosotros, que nos acompañan, y que no es algo “de otro planeta” o de personas “con túnica de cualquier color” aprender sobre las emociones.
Comencé a darme cuenta de ello cuando aprendí a ser consciente, o al menos lo intenté. Jon Kabat-Zinn, a quien tuve el privilegio de conocer personalmente, y de quien recibí formación, ha sido un enorme acicate para mí.

P: ¿Estás de acuerdo con que todas las decisiones que tomamos tienen un peso emocional?
R: No sabría decir si el peso es mayor o menor, pero sí creo que existe ese factor en nuestras decisiones. Es natural.

P: ¿Cómo te consideras: racional o emocional?
R: Pues no sabría definirlo. Básicamente, porque creo que cada uno de nosotros somos más racionales que emocionales, y al contrario también, en diferentes circunstancias. Supongo que dependerá del contexto y de tu propósito, o tu deseo de querer ser más racional o más emocional.

P: Sé que has estudiado Mindfulness y lo practicas… ¿Es complicado calmar tu mente y disfrutar del aquí y ahora?
R: Sí, comencé a estudiar Mindfulness en el contexto del uso de esa práctica en la empresa y en la gestión de equipos profesionales. Y continué porque me interesó mucho como práctica en la vida diaria. Tuve la suerte y la oportunidad de ser alumna de su precursor, Kabat-Zinn, de quién aprendí, básicamente, que es bueno ir por la vida “paso a paso”, ser consciente, o intentarlo, y cuidar tu entorno humano en cualquier circunstancia, sea personal, familiar o profesional.
Sobre el hecho de calmar tu mente y ser consciente del “aquí, ahora”…  como todo, si quieres y aprendes a hacerlo, no es complicado. Al final es, o intenta ser, un hábito. La realidad puede superarte a veces, y de hecho te supera, pero si has adquirido ese hábito es más fácil de conseguir. A fin de cuentas, se trata de tener herramientas para solventar situaciones insisto, tanto en lo personal, como en lo profesional y el trabajo con equipos profesionales. En este caso creo que es de una enorme utilidad, y es muy agradable y gratificante observar cómo las personas se ilusionan conforme aprenden que en el trabajo también se puede ser humano, feliz, minimizador de conflictos, a la par que productivo y muy eficaz, si se es consciente.

P: Vamos a hacer ahora lo que en mi consulta llamo “termómetro emocional”. Quiero que valores del 1 al 10 las emociones básicas que describió en su momento Paul Ekman, atendiendo al momento actual de tu vida.
Alegría
R: 6. Por definición.
P: Tristeza
R: 4. Siempre existe, es natural.
P: Repugnancia
R: 1. Prefiero no tenerla, pero ocurre a veces.
P: Miedo
R: 1. Nos acompaña, pero… ¿quién dijo miedo?
P: Ira
R: 2. Si existe, es mejor controlarla.
P: Sorpresa
R: 8. Quiero estar siempre sorprendida, con mente de principiante.


Análisis de la CNV de Rosa
Mantener una entrevista con Rosa es muy agradable, porque te recibe con una sonrisa, gesto que involuntariamente hace para que su cerebro segregue más cantidad de serotonina y estar prevenida por si le planteo alguna pregunta incómoda. Antes de comenzar, ladea la cabeza hacia la izquierda señal de que sus emociones están a flor de piel. La primera pregunta le hace llevar los ojos hacia abajo para conectar con su interior. Maneja bien los silencios y tarda en contestar, señal de que es una mujer precisa y maestra de la comunicación. Se nota que estoy ante una veterana periodista.
Antes de contestar, muestra las palmas de las manos en señal de su honestidad. A lo largo de la entrevista, en varias ocasiones se frota las manos y se toca el dedo anular, lo que indica que le gusta moverse en entornos seguros. Sin embargo, eleva las cejas cuando hablamos del peso emocional de las decisiones. Eso indica que la ciencia, la comunicación y la vida le siguen sorprendiendo. Uno de sus nuevos proyectos es poner en marcha “Abejar Radio”, pionera iniciativa de emisora de radio hecha por y para enfermos del  Centro Neuropsiquiátrico Nuestra Señora del Carmen, que ha recibido recientemente el especial reconocimiento de la Asociación Española de Radio Online (AERO).
También acompaña, como consultora, a empresas que realizan su transición hacia el mundo plenamente digital.  Rosa es una mujer auténtica, sensible y que pone su inteligencia al servicio de la innovación.


SARA DOBARRO

Un comentario

  1. Maravillosa entrevista, Nos ayuda a abrir nuestra mente y corazón.
    La neurociencia, es un tema apasionante, todo lo que aporta son valores positivos.

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